"Que estas palabras sean de tu comprensión y ayuden a liberar tu mente de los males que la azotan"
Allá donde se elevan las cumbres del abismo hacía la libertad,
que pacen en lo alto, en donde los tres soles brillan con intensidad,
las luces rebotan y caen en dirección hacía la oscuridad,
allá donde vive el cuerpo, muere el espíritu,
he comprendido...
(Quien en esta ordenación numérica atisbe a comprender su significado, habrá comprendido una ley del Cosmos)
- He comprendido que no hay lugar para mí, y ya no me quiero, pues solo me veo como un reflejo en el agua, y cuando algo de viento de la vida sopla, me veo deformandome, me veo pues como un engaño.
- He comprendido que lugar no hay para mí en el mundo.
- He comprendido el alma de los ignorantes, y en la cuenta he caído de que el reino de las piedras no es nuestro reino, es el suyo, ende, no luchemos más por dicho reino.
- He comprendido que nuestro reino es el reino que vira hacía el cielo, por encima de las nubes, en dirección hacía las estrellas, más allá de los tres soles.
- He comprendido que soy odiado o vilipendiado allá por donde paso. Los sentimientos de la masa, de la ira que la sumerge, no son los míos.
- He comprendido que la masa al pasar junto a ella una misma voz me dice "desterrado de nosotros y nosotras seas" Y pues mi voz sea hacía ellos "y vuestro corazón sea conmigo en tal viaje"
- He comprendido que no comprendo las risas de aquellos que presumiendo de virtud erran para presumir de ella, y satisfacciendose aún más dicen errar como forma de justificar el haber acometido una virtud.
- He comprendido que no comprendo nada de aquellos que dicen vivir, sonríen al vivir, hablan como si de cien existencias tuvieran en una sola; y en realidad viven para morir en su día a día.
- He comprendido que no hay lugar para mí en las mentes que siguen girando en la eterna rueda del tiempo. Como la rueda que gira y sigue a la pezuña del buey, las mentes giran sobre sí mismas y no se dan cuenta de que en sí mismas no giran, sino que son arrastradas fruto de querer seguir girando sobre sí mismas.
- He comprendido que una llama no arde por mucha más leña que se la eche encima, sino que la verdadera llama arde sobre sí misma, aún incluso sobre cenizas, pues quizás la razón de que la llama siga ardiendo es que cree que puede arder, ende, jamás se consumirá.
- He comprendido que al final me marcharé sin nada, mi cuerpo terminará ardiendo como un leño seco: mi nombre será olvidado en el comienzo de su fin, en el albor de los tiempos; mi legado se consumirá tan pronto como el aire dejó de insuflarlo. Pero en cambio mi alma partirá hacía las estrellas, dado que no tendrá peso, será ligera, y nada la retendrá de este mundo. Pues se sabe por aquella ley universal de la gravedad, que lo que más pesa se termina hundiendo en las profundidades, sin luz, y termina pereciendo.
- PRINCIPIOS FUNDAMENTALES DE MI COMPRENSIÓN, SOLO PARA LIBRES, ABSTENGÁNSE LOS IGNORANTES POR MUCHO QUE DICHO ENUNCIADO LES PUEDA PARECER ATRACTIVO.
- He comprendido la razón del conocimiento, sino una parte de ella. Y es que el conocimiento nunca tuvo un fin, mas y tenerlo solo forma parte de una bula para los que viven apegados a la vida terrenal. El verdadero sentido del conocimiento es preservar una esencia dadora desde que el finito se llamo así mismo infinito y viceversa. El conocimiento nunca tuvo una base, ni tuvo un desarrollo, pues lo nuevo nunca existió, mas y solo esperó a que las mentes más desarrolladas pudieran captar una parte de él, y así durante eones. Y cada parte, cada razón de este, fuera una luz que permitiera liberarse de la gran rueda a los que fueron capaces de comprender al conocimiento y a su tiempo en el cual se desarrolló.
- He comprendido que todo es mente y el universo es mental. Todo es generado por nuestra mente, pues todo es nada a la inversa, y nada es todo.
- He comprendido que sea aquí, y es adelante, y mas y es abajo, y mas se gira a la izquierda, para luego girarse a la derecha. Los fenómenos, la existencia misma, todo es correspondido, dado que uno no puede seguir sin lo otro.
- He comprendido que nada esta inmóvil, que todo vibra. Pero he comprendido que todo si no vibra no es nada, pues si no vibra será todo, pero es nada. En cambio si vibra, será uno en el todo, no uno del todo.
- He comprendido que todo es dos en uno. El bien y el mal se tocan, como se tocan los polos positivos y negativos del átomo. Nada puede vivir sin su algo, al igual que la luz no puede vivir sin la oscuridad, pues si no hubiera oscuridad la luz no podría manifestarse sobre ella, al igual que la oscuridad sin la luz no podría manifestarse como tal, llamarse así misma como lo que quisiera ser, porque al no poder ser no sería nada, no existiría. E igual pasa con la verdad, la verdad vive gracias a la mentira, y la mentira gracias a este, y así, nunca habrá una verdad ni una mentira, habrá un poco de cada, y así se caminará en el conocimiento, y se caminará siempre por una senda flanqueada por un precipicio. Ambos parecerán agradables según la intención, será tentador caer en ellos, pero si se cayera, no habría nada que no fuera el fin, la oscuridad.
- He comprendido que todo fluye, avanza, y tiene su retroceso, el ser capaces de fijar nuestra atención sobre ello y fijar un equilibrio marca el fluir de nuestras vidas.
- He comprendido que toda causa tiene su efecto, y todo efecto su causa. Nada escapa a la Ley. El ser capaces de no interferir en ambas manifestaciones, marcará el devenir del individuo, que sin causa, al no creer en esta, tampoco tendrá efecto, y así, podrá liberarse de dicha Ley. Así mismo, podrá manejar al conocer el principio de la dualidad que he enunciado ambas polaridades, y así poder regir el plano de su existencia de una forma más suti y amena.
- He comprendido que todo es masculino y la vez femenido. Nunca habrá un género validero. El que es hombre en lo heroíco, es mujer en lo preservativo. El que es mujer en lo preservativo, es heroíco en la defensa, en el impulso de sus causas. Ambos opuestos se corresponden en ambos géneros mutuamente.
- He comprendido que todo puede ser transmutado, al igual que el cuerpo puede ser evaporizado, condensado en agua, el alma puede ser también condensada en frialdad, en odio, en amor. Nada escapa a los cambios que se puedan producir dentro de dicho elemento.
- He comprendido que más allá del Kosmos, de todo lo que rodea al ser, a la piedra, a la estrella, a la verdad y a la mentira, a la luz y a la oscuridad, se encuentra una verdad, el Todo. El todo no es distancia, pues distancia termina cuando mas ya no se puede medir por medios; el Todo no es fuerza, pues todo lo que sube, baja; el Todo no es luz, pues todo lo que brilla, se apaga. El Todo no se puede medir, pues el Todo no tiene medida, siempre habrá algo más dentro del Todo, y el Todo pues es infinito como ha sido en eones y eones de tiempo. El Todo es espiritu, y el espiritu es el Todo.
- He comprendido que el Universo es una creación mental sostenida por la mente del Todo, toda mente es una así misma y a la vez es parte del Todo.
- He comprendido que la verdadera sabiduría es aquella que para ser llamada así misma "sabiduría" se emplea de saberse así misma como mentira, de luchar con lo mucho contra lo menos, chocando, y limando las impurezas de la "sabiduria"
- He comprendido que todo en el Todo, y Todo esta en todas las cosas.
- He comprendido que tres son los planos del gran camino: El fisico, el mental, y el espiritual. Quien esto comprenda habrá comprendido una parte de sí mismo, y sabrá ubicar en que parte del camino sus pies caminan, pues habrá comprendido la energía sobre la que su alma camina.
- He comprendido que nada esta quieto, y es necio quien se mueve y cree estar quieto, pues continuamente acelerará para frenar en seco, y será la misma fuerza con la que se pronunció, la misma que le frenará, ende le comprimirá, generándole más angustia y sufrimiento.
- He comprendido que yo y mi forman parte del plano material, dado que yo y mi necesitan para desarrollarse el halito del ser que les mana. Yo y mi son una creación del plano mental del Todos, ende, no se pueden eliminar, pero sí apartar del camino y olvidar en el sin fin del abismo del camino.
- He comprendido que por mucho que la flor sea bella tenga aroma, sino generá, sino se manifiesta no podrá ser flor. Quien esto comprendierá podrá comprender como de la flor al morir, pervive el aroma, la esencia que la creo. Quien esto comprenda será capaz de liberarse del yo y del mi, y hallará el camino de la virtud, la senda de la iluminación.
Aquí termina mi infinita comprensión que no conoce ni de edad, ni de tiempo, pues mi comprensión es el Todo. Bienvenidos aquellos y aquellas que estas palabras hallan sido capaces de comprender, se habrán comprendido así mismos y mismas.
Un saludo.
Máscara del autor de este texto: Alexander Rol
Esencia del autor de ese nombre: Una conciencia venida del Todo.
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